TROMBOSIS VENOSA PROFUNDA

  • ¿Qué es una trombosis venosa?

    Las venas son los vasos que se encargan de transportar la sangre desde los tejidos y los órganos de vuelta hacia el corazón. Una ocupación de este vaso por sangre coagulada se conoce como trombosis venosa que según la antigüedad, puede ser aguda o crónica.

  • ¿Por qué se produce?

    Se trata de una enfermedad en la que influyen múltiples factores de riesgo, que aumentan la probabilidad de que se produzca cuando están presentes. Las alteraciones genéticas de la coagulación, las cirugías recientes (sobre todo algunas intervenciones traumatológicas de rodilla o cadera, neurocirugía, cirugía abdominal), el reposo prolongado, los viajes largos, las enfermedades tumorales, representan situaciones de riesgo para que se produzca una trombosis venosa profunda.

  • ¿Cómo se diagnostica?

    La sospecha clínica se suele acompañar de alteraciones analíticas (elevación de dímero d), siendo la ECO-Doppler el método diagnóstico de elección para descartar la trombosis venosa profunda en miembros inferiores. A veces es necesario completar el diagnóstico con TAC con contraste para ver la extensión pélvica/abdominal de la trombosis y/o descartar la presencia de tromboembolismo pulmonar (TAC de tórax).

  • ¿Cómo se trata?

    El tratamiento de la trombosis venosa profunda tiene por objetivo restablecer la permeabilidad del eje venoso afecto, evitar las secuelas derivadas de la falta de repermeabilización, evitar la embolia pulmonar y tratar las alteraciones anatómicas subyacentes, si es que las hay.

    Los pilares básicos del tratamiento en un momento inicial son la anticoagulación, el reposo con movilización precoz y la terapia compresiva. En algunos casos existe indicación de disolver el trombo con procedimientos invasivos (fibrinolisis guiada por catéter, fibrinolisis fármaco-mecánica) y de tratar segmentos estenóticos venosos mediante el implante de stents (Sdr de May-Thurner).